Por: Melanie M. Pérez

Número uno: el helado, número dos: el color amarillo..., número diez: algo con rayas, número once: las guerras de agua, número veinte: que llueva cuando hay sol...  

La vida se ha vuelto tan rutinaria y monótona, tan normal, tan simple. ¿Pero qué tal si es esa simpleza la que le agrega el toque maravilloso? A los siete años es fácil sorprenderse y emocionarse con todo lo que nos rodea, ¿por qué de adultos ya no es así? ¿Por qué nos cuesta tanto? ¿Y si hacemos una lista donde enumeramos Puras Cosas Maravillosas? 

Este es el preámbulo de una obra reconectante, la historia de un pequeño cuyas circunstancias personales lo llevan a descubrir lo impactante de la cotidianidad. Una madre con problemas psicológicos en un hospital es el motor perfecto para que este pequeño comience su inocente lista de cosas que encuentra maravillosas en la vida, se trata de cosas simples y poco materiales. Esta lista al principio es un obsequio para su madre, sin embargo, pronto cobrará vida propia para darle sentido a la existencia de cada uno de los personajes que conforman la historia. 

En este monólogo, Pablo Perroni nos regala no sólo algo conmovedor, también nos obsequia magia, recuerdos y lo más importante: nos invita a reflexionar sobre diversos temas. Por ejemplo, el papel de la salud mental, un tema muy importante y que apenas hace un par de años comenzó a tomar relevancia, por otro lado la pérdida de esa inocencia característica de la infancia, el dolor, el procesamiento de situaciones difíciles, el primer amor. 

El texto, de Duncan Macmillan y Johnny Donahoe bajo la dirección de Sebastián Sánchez Amunátegui se convierte en eso que no sabías que necesitabas ver, escuchar y sentir. Y es que después de este tiempo de pandemia, muchas cosas saltan a la vista y una de esas es precisamente la importancia de disfrutar de los placeres sencillos que nos regala la vida y sin duda este unipersonal queda a la perfección ahora que se ha dado el regreso no sólo a los teatros sino a la vida como la conocíamos antes.

El montaje resulta sencillo pero preciso para lo que comunica, permite un ambiente cercano, seguro y cómodo donde la interacción con el público es fácil y emocionante y por supuesto algo de aplaudirse es la música, jazz y algo de soul en los momentos correctos amenizan esta experiencia que estamos seguros no te arrepentirás de vivir, y quién sabe, en una de esas te animas a iniciar tu propia lista de Puras Cosas Maravillosas. 

Al final de todo, esta puesta en escena nos hace reconectar con la vida, con lo que nos rodea y con los seres que han marcado nuestro rumbo, es una verdadero deleite para el alma, pues a demás de lo anterior, resulta divertida y seguro te reirás en más de una ocasion. Puras Cosas Maravillosas se presenta en el Foro Lucerna los lunes a las 20:30 hrs, del 7 al 28 de marzo de 2022. 

Dramaturgia: Duncan Macmillan y Johnny Donahoe. Dirección: Sebastián Sánchez Amunátegui. Elenco:  Pablo Perroni. Duración: 1 hora 20 minutos